Como los tiburones, Karina Milei olió sangre en el centro del poder de la Ciudad de Buenos Aires cuando el pasado 18 de mayo su candidato, el vocero presidencial, Manuel Adorni, casi duplicó en votos a la adalid del PRO, Silvia Lospennato. Por eso, la Hermanísima no acepta la posibilidad de tregua que deslizó Jorge Macri y se prepara otra vez para marchar a la guerra.
"No lo hemos hablado. Es algo que hay que hablar entre partidos y con Mauricio Macri, pero no descarto la alternativa de un acuerdo electoral para octubre", reveló este martes el jefe de Gobierno porteño en diálogo con Radio Mitre.El momento no es casual. El PRO viene de cerrar una alianza con los libertarios en la provincia de Buenos Aires que, según uno de sus artífices, Cristian Ritondo, fue "mucha ganancia" para la tropa amarilla. En un contexto donde las encuestas dan cuenta de que buena parte del electorado cambiemita se tiñó de violeta, el partido que conduce Mauricio Macri logró colar en las listas entre 8 y 10 nombres que podrían entrar en la Legislatura Bonaerense de los 12 que debía renovar.

Juan Mateo Aberastain Zubimendi / MDZ.Ese armado incluyó a intendentes muy cercanos a Jorge Macri, como su mano derecha en Vicente López, Soledad Martínez, aunque otros cuatro viraron hacia otras propuestas más de centro como Hechos o Somos Buenos Aires. Por eso, el exDJ consideró que se logró "un buen acuerdo" para enfrenar al kirchnerismo y abrió la puerta a repetir el esquema en la Capital Federal.
De fondo, el debate que persiste es identitario. La boleta que llevará la alianza de amarillos y violetas en tierras bonaerenses se llamará La Libertad Avanza, y hay quienes advierten que el León ya se comió al gato.
"No creo que sea así, tenemos tres gobernadores, intendentes, identidad y una manera de hacer política. Lo importante es seguir laburando para sacar el país adelante", fue la respuesta de Jorge Macri, que además destacó "los aportes del PRO" y su rol a la hora de marcar "las cosas que se podían hacer de manera distinta".
Sin embargo, la disidencia no es una cualidad muy valorada en los cuarteles de 'El Jefe', que se encargó de demostrarlo este fin de semana cuando -lapicera en mano- barrió de las listas libertarias los nombres de Las Fuerzas del Cielo, el sector de la militancia que responde al asesor de Santiago Caputo y que había confrontado abiertamente contra el armado karinista de Sebastián Pareja y los Menem.

Por eso, cerca de la presidenta de La Libertad Avanza fueron tajantes: "No hay chances de cerrar un acuerdo con Jorge Macri en la Ciudad". En ese sentido, en las trincheras porteñas adelantaron a MDZ que en octubre jugará "la misma estrategia de mayo", donde Manuel Adorni levantó el estandarte de "kirchnerismo o libertad" para desplazar al PRO de la discusión y dejar que la polarización exacerbada haga lo suyo.
Motivos no faltan. Ambas fuerzas habían llegado a las elecciones de mayo con un vínculo muy desgastado, producto de marcadas diferencias en la Legislatura porteña que tuvo su episodio más destacado alrededor del proyecto de Presupuesto. Allí el PRO acusó a la bancada liderada por Pilar Ramírez de "jactarse de ir contra la casta pero votar con el kirchnerismo y la izquierda", mientras que los libertarios argumentaban que su rechazo se debía a un aumento de impuestos.

La ruptura total llegó cuando Jorge Macri decidió desdoblar los comicios locales de los nacionales, pensando que eso le otorgaría una ventaja frente a La Libertad Avanza. Javier Milei lo consideró una traición. La acusación se redobló cuando se conoció que el oficialismo porteño había contratado para encarar las elecciones el asesoramiento del catalán Antoni Gutiérrez-Rubí, a quien el presidente le impugna haber sido en 2023 el responsable de "la campaña más sucia de la historia" bajo el ala de Sergio Massa.
A lo largo de las pocas y vertiginosas semanas que duró la campaña, el PRO y La Libertad Avanza se sacaron chispas, cruzaron chicanas e incluso circuló un video hecho con inteligencia artificial donde un doble de Mauricio Macri llamaba a votar a Manuel Adorni en lugar de a su candidata.
Los resultados fueron contundentes: el vocero presidencial se impuso con el 30,13% de los votos, Leandro Santoro (Unión por la Patria) quedó segundo con el 27,35%, y Silvia Lospennato quedó lejos con el 15,92%.


La alternativa que enfrenta el PROCon esos resultados en mente, en Casa Rosada se mostraron un poco más flexibles, pero las condiciones fueron terminantes. "Que vengan sin pretensiones. Si Jorge Macri acepta que vale 15 puntos en su Ciudad, nos podemos sentar a negociar", lanzó un funcionario a MDZ.
Para sumar peso a su amenaza, la estrategia libertaria tiene guardada una carta fuerte para jugar en octubre: la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que hoy se encamina a ser candidata a senadora nacional por la capital Federal.


Esto abre una discusión dentro del PRO, que enfrenta una división interna entre un sector alineado con el jefe de Gobierno y la diputada nacional María Eugenia Vidal, más proclive a conformar un "Juntos por el Cambio reloaded" y otra parte sostenida en Mauricio Macri que defiende la corriente de llegar a un acuerdo con los libertarios.
En medio de ese debate, una alta fuente amarilla aseguró a este medio que aún no hubo mayores conversaciones para intentar llegar a un acuerdo en la Ciudad. "Todavía falta", el cierre de alianzas para las elecciones de octubre es el 7 de agosto.
Sin embargo, el tiempo corre y el PRO deberá tomar una decisión: volver a confrontar con La Libertad Avanza a pesar del duro golpe que recibió en mayo, o entregar las armas y correr el riesgo de quedar relegado en las listas confeccionadas por Karina Milei que, como bien cuentan quienes la conocen: "Perdona pero no olvida".