El exdirector de Asuntos Jurídicos de Vialidad, Luis Goldín, criticó la doble vara de la justicia al no investigar un presunto esquema de corrupción millonaria protagonizado por Javier Iguacel, exadministrador general de Vialidad Nacional durante la gestión de Mauricio Macri.

Según Goldín, entre 2017 y 2019 la Agencia Nacional de Seguridad Vial transfirió $1.300 millones a la Administrador general de Vialidad Nacional, entonces dirigida por Iguacel, para realizar obras públicas que nunca se hicieron.

“Es un caso de corrupción impactante. Un caso que implica 15 veces el presupuesto que está reclamando el Hospital Garrahan. Estamos hablando del equivalente a más de 500 mil canastas básicas. Medio millón de familias podrían estar comiendo con ese dinero”, denunció.
Luego detalló que al asumir la nueva gestión en 2020 se realizó una auditoría sobre los fondos transferidos y los supuestos destinos. El hallazgo fue lapidario: no había un solo certificado de obra ni facturas que respaldaran el uso de los fondos. “Cursamos cartas documento a las empresas involucradas y las respuestas fueron claras: no se hicieron las obras, ni siquiera se habían solicitado”, afirmó.
El exfuncionario explicó que se llevó a cabo una auditoría integral en los puntos donde se suponía que debía haber obras de infraestructura, y el resultado fue contundente: las obras estaban incompletas o directamente no existían.
Pese a la gravedad de las irregularidades, la causa permanece estancada en Comodoro Py desde hace más de cinco años. La denuncia penal contra Iguacel quedó en manos del juez Julián Ercolini y del fiscal Gerardo Pollicita, los mismos que intervinieron en la denominada “causa Vialidad” en la que fue condenada Cristina Kirchner, que comenzó con una denuncia del propio Iguacel.
“La diferencia es que en una causa está Cristina Fernández, y en la otra está Iguacel, protegido por Mauricio Macri y, actualmente, por Javier Milei. Esta causa duerme el sueño de los injustos. No se investiga este robo, que actualizado supera los $100 mil millones”, sostuvo Goldín con indignación.
“Pedimos que la justicia avance, que se active esta causa que lleva más de cinco años paralizada. No puede ser que haya causas que se impulsan con velocidad solo cuando hay ciertos nombres y otras que quedan congeladas cuando los acusados son protegidos del poder real”, concluyó Goldín.